Sangtekst: Silvio Rodriguez. De La Ausencia Y De Ti.
Ahora solo me queda buscarme de amante la respiracion,
no mirar a los mapas, seguir en mi mismo,
no andar ciertas calles, olvidar que fue mio
una vez cierto libro.
O hacer la cancion y decirte que todo esta igual:
la ciudad, los amigos y el mar
esperando por ti.
Sigo yendo a Tete semana tras semana
-?te acuerdas de alla?-.
Hoy hablo de fusiles despidiendo muertos;
yo se que ella me ama;
es por eso tal vez que te siento en su sala,
aunque ahora no estas,
y se siente en la conversacion,
-o sera que tengo la impresion
de la ausencia y de ti-.
No quisiera un fracaso en el sabio delito que es recordar,
ni en el inevitable defecto
que es la nostalgia de cosas
pequenas y tontas,
como en el tumulto pisarte los pies
y reir y reir y reir,
-madrugadas sin ir a dormir-:
si, es distinto sin ti, muy distinto sin ti.
Las ideas son balas hoy dia
y no puedo usar flores por ti.
Hoy quisiera ser viejo y muy sabio
y poderte decir lo que aqui no he podido decirte:
hablar como un arbol con mi sombra hacia ti,
como un libro salvado del mar,
como un muerto que aprende a besar
para ti.
no mirar a los mapas, seguir en mi mismo,
no andar ciertas calles, olvidar que fue mio
una vez cierto libro.
O hacer la cancion y decirte que todo esta igual:
la ciudad, los amigos y el mar
esperando por ti.
Sigo yendo a Tete semana tras semana
-?te acuerdas de alla?-.
Hoy hablo de fusiles despidiendo muertos;
yo se que ella me ama;
es por eso tal vez que te siento en su sala,
aunque ahora no estas,
y se siente en la conversacion,
-o sera que tengo la impresion
de la ausencia y de ti-.
No quisiera un fracaso en el sabio delito que es recordar,
ni en el inevitable defecto
que es la nostalgia de cosas
pequenas y tontas,
como en el tumulto pisarte los pies
y reir y reir y reir,
-madrugadas sin ir a dormir-:
si, es distinto sin ti, muy distinto sin ti.
Las ideas son balas hoy dia
y no puedo usar flores por ti.
Hoy quisiera ser viejo y muy sabio
y poderte decir lo que aqui no he podido decirte:
hablar como un arbol con mi sombra hacia ti,
como un libro salvado del mar,
como un muerto que aprende a besar
para ti.
Silvio Rodriguez